El temido momento llegó hace un par de días, cuando me encontraba de semanita de asueto en Santander. Cierto es que era por la noche, acababa de cenar abundantemente y encima iba vestido, pero no debo regocijarme en excusas. La báscula indicó 90 kilos.
Así, de golpe, me di cuenta de que estoy gordo. Y no tengo exucusas. Me he dejado, y hace un año pesaba 10 kilos menos, así que he cogido el guante a la báscula y me voy a poner cachas.
Sí, sí, no se rian estimados lectores. Que esta vez va en serio.
Y además estarán todos ustedes como testigos.
Hace mucho tiempo que no escribo aquí, y la razón es que cada vez me aburre más soberanamente hablar sobre política, dándole vueltas siempre a los mismos temas. Asi que paso de política, y voy a reorientar el blog a mi andadura para ponerme cañón.
Dieta+Ejercicio+Buen humor es la receta.
Ya les iré comentando más detalles, pero por ahora que sepan que voy en serio, he vuelto y estoy aquí para quedarme!
A dónde vas / Patatas traigo
Hace 13 años
1 comentario:
Que pasa chavalote!
A sí que cañon, ehhh. Pues a algunas nos gustan más las lorzas que los músculos, chaval.
Ahora en serio, ánimo con el deporte, que un poco de ejercicio nunca viene mal. Y a ver si vienes por barna, que estoy dándole vueltas a un proyecto que te va a encantar.
Un abrazo,
Noemí
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